Pan de molde I

Hace tiempo que me niego a comprar pan de molde a no ser que no me quede otro remedio. Y es que hacer pan de molde en casa es super sencillo, con un resultado estupendo, y con muchas ventajas.
El pan de casa no tiene conservantes, ni colorantes, ni aromas añadidos, ni emulsionantes, ni azúcar, ni nada que no sea harina, agua, levadura, un poco de leche, una pizca de mantequilla y sal.
Y con buenos ingredientes solo se pueden obtener buenos resultados.
El placer de almorzar un sandwich a media mañana, relleno con un poco de aguacate o unos tomates asados o un poco de txaka con lechuga o una crema de cacao casera.....o lo que se te ocurra ese día, y saber que ese pan lo has hecho tú con tus propias manos, y que es natural de verdad, no tiene precio.
Este pan no va a ser como el de paquete y no te va a durar dos meses si estropearse, pero con lo bueno que está tampoco le va a dar tiempo a echarse a perder. Tiene una miga jugosa y tierna y el sabor es delicado.
Yo lo conservo en una bolsa de plástico de las de congelación ya cortado y voy preparando bocatas para mi hija a lo largo de la semana. El sábado si aún queda alguna rebanada, la tuesto para el desayuno y vuelta a empezar.
Además cada semana lo preparo diferente, a veces blanco como este, otras veces integral, o con semillas. Ya os iré poniendo las diferentes recetas.
Preparación:15 - 35 minutos, levado 1,45 horas y horno 25 minutos
Ingredientes para un pan de 28 cm
500 gr de harina de fuerza
15 gr de levadura fresca 
5 gr de sal
300 gr de agua
50 gr de leche entera
25 gr de mantequilla a temperatura ambiente
  • Pon la harina en un bol, desmenuza la levadura dentro, añade la sal, la leche y casi todo el agua.
  • Mezcla y comienza a amasar, si ves que está muy seco termina de añadir el agua que no hayas utilizado. Esto se hace porque no todas las harinas absorben igual, y es mejor no añadir todo el agua de golpe.
  • Una vez mezclados todos los ingredientes la masa estará pegajosa y algo grumosa. Deja reposar durante 10 minutos antes de seguir amasando.
  • Mira la diferencia entre una y otra masa. La segunda, es después de este reposo y un pequeño amasado de nuevo.
  • Una vez amasado esta segunda vez, estira un poco la masa y coloca la mantequilla en trocitos pequeños.
  • Envuelve y vuelve a amasar hasta que de nuevo esté integrado todo. En esta fase si te parece que la masa está muy blanda y te resulta difícil de trabajar, puede ser interesante utilizar el amasado francés, que consiste en recoger la masa como si cogiéramos a un bebé por las axilas, la parte que cuelga de masa se golpea sobre la encimera, y se envuelve con la parte que tenemos en la mano. Como una imagen vale más que mil palabras te dejo un enlace a un video de Iban Yarza muy cortito pero que se ve claramente en que consiste.  Pincha aquí
  • La puedes dejar reposar otros 10 minutos y terminar de amasar después de este tiempo. Los tiempos de reposo facilitan muchísimo el trabajo de amasado y la diferencia en la masa se nota mucho.
  • Coloca la masa de nuevo en el bol, en el que habrás puesto un poco de harina espolvoreada, para que no se pegue.
  • Tapa con film trasparente (yo utilizo un gorro de ducha, es muy práctico) y deja reposar en un lugar cálido (23 o 24º) durante una hora. Doblará prácticamente su volumen. Si la temperatura es más fría, tardará algo más en crecer.( Ver nota final)
  • Pasado este tiempo de levado espolvorea un poco de harina sobre la mesa y saca la masa del bol.
  • Aplástalo suavemente con las manos enharinadas para sacar parte del gas que tiene.
  • Al aplastarlo se formará un rectángulo, bueno si no se forma, le tendrás que ayudar tú. jeje
  • Ahora dobla una tercera parte del rectángulo y aprieta, y luego la otra parte, para darle forma de rulo. Mira la foto para que sepas lo que te quiero decir.
  • Mete este rollete en el molde que habrás untado con aceite por todos los lados o con mantequilla, y vuelve a tapar y deja durante 45 minutos mas o menos para que vuelva a crecer.
  • 20 minutos antes de cocer el pan enciende el horno a 220º.
  • Introduce el pan y déjalo cocer durante 20 o 25 minutos, dependerá de cada horno, hasta que esté crecido y doradito.
  • Saca del horno con cuidado, desmolda y deja enfriar sobre una rejilla.
  • Cuando esté frío, corta en rebanadas con un cuchillo de sierra para no rasgar el pan y guarda en una bolsa para que se conserve mejor.
Nota final: Si en la cocina no hay mucha temperatura, puedes meter tu masa en el horno apagado y poner dentro también una jarra o cazo con agua caliente.
Cierra el horno y se creará una cámara de levado casera, acelerando un poco el proceso.
Nota II: Si lo haces en un molde de 20 cm con esta cantidad queda un pan bastante más alto. Elige lo que más te convenga o adáptate al molde que tengas.

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