Galletas de nata

Estas galletas las preparé para una amiga muy especial. A ella se las preparaban sus tías, hace mucho tiempo cuando era niña y quería recordar ese sabor tan rico de nata, nata de la leche de verdad.

Así que me cogí el mejor recetario del mundo, que es el de mi madre y ahí tenía la receta perfecta.

Con esta receta salen unas 30 galletas, crujientes por fuera pero esponjosas por dentro y con un sabor difícil de comparar con cualquier otro que se pueda comprar.
Preparación: 35 minutos

Ingredientes

250 gr de nata de verdad de la que sale en la leche cuando cuece (ver nota final)

250 gr de azúcar

150 gr de harina

100 gr de maizena

1 huevo

12 gr de levadura química

• Calentamos el horno a 180º.
• Batimos el huevo con un par de cucharadas o tres del azúcar.
• Le incorporamos la nata y el resto del azúcar y seguimos batiendo con unas varillas eléctricas.
• Cuando esté bien batido, iremos echando poco a poco las harinas tamizadas junto con la levadura. Pero ahora vamos a mezclar con una espátula o cuchara de madera.
• Cuando tengamos toda la masa lista preparamos la bandeja del horno con papel sulfurizado y vamos poniendo porciones del tamaño de una cucharilla de postre. Separadas unas de otras ya que con el calor se extienden más del doble del tamaño que pongamos.
• Los dejamos cocinar durante unos 13 minutos hasta que estén doradas. 
• Las sacamos con papel y todo y dejamos enfriar. Mientras ponemos otra tanda de galletas, hasta acabar con toda la masa.
• Las galletas salen del horno algo tiernas pero se endurecen un poco al enfriarse.

Nota: Se conservan muy bien durante 3 o 4 días si se guardan en una caja metálica o bien envueltas en papel de aluminio. Aunque no suelen durar tanto, claro.

Si no tenéis nata de verdad, se pueden hacer con una tarrina de nata fresca espesa que se puede comprar en algunos supermercados.