Roscón de reyes

El roscón de reyes era uno de los retos en la cocina que me quedaban pendientes.
Siempre que leía las diferentes recetas me parecía excesivamente laborioso y complicado.
A menudo queda un bollo rico pero apelmazado y denso, que se parece más a lo que venden en los supermercados del barrio que a los roscos de pastelería profesional.
Luego decidí apuntarme a un curso para aprender a hacerlos, ya que no conseguía el resultado que esperaba.
Y aunque tampoco pretendía que fuese el mejor roscón del mundo, si, que se pareciese un poco más a uno bueno, lo suficiente como para no echar de menos los que habitualmente compraba.
Bueno pues creo que lo he conseguido y lo mejor de todo es que la receta no es complicada.
El truco es dejar la masa preparada por la tarde y dejarla al fresco toda la noche, para hornear al día siguiente a la mañana, sin prisas y sin preocupaciones.
El frío de la calle hará el trabajo por nosotros. Os lo explico mientras os cuento la receta.
Os animo a intentarlo porque de verdad que no es nada difícil, sale seguro, y está muy tierno.

Preparación: 25 minutos de horneado 30 minutos de preparación, 3 horas de levado en dos fases y una noche entera de espera.

Ingredientes para un roscón de unas 10 raciones más o menos:
Prefermento:
130 gr de harina de fuerza
70 gr de leche
10 g de levadura fresca de panadero
1 cucharadita de azúcar
Para el roscón:
Todo el prefermento
120 gr de azúcar
450 gr de harina de fuerza
1 naranja (la ralladura de la piel)
60-80 ml de leche (ver nota final)
60 gr de mantequilla a temperatura ambiente (sacadla del frigorífico al menos  una hora antes)
2 huevos medianos
15 gr de levadura fresca de panadero
1 pellizco de sal
3 o 4 cucharadas de agua de azahar (según os guste mas o menos el sabor)
Para decorar:
azúcar perlada
fruta confitada
huevo batido

  • El primer paso es sencillo y divertido. Mezcla los ingredientes del prefermento y haz una bola uniforme con ellos.
  • En un bol echa agua tibia y mete la bola que has preparado. El agua debe cubrirlo. 
  • Al cabo de unos 20  minutos la bola como por arte de magia habrá flotado hasta quedar más de la mitad por encima del agua.
  • En el bol de la amasadora si es que tienes o en cualquier otro bol si lo vas a hacer a mano, pon la harina tamizada, la bola flotante de antes, y el resto de los ingredientes y mezcla bien. 

  • Amasa sobre la encimera hasta conseguir una masa suave y homogénea. Si te cansas mucho puedes amasar en 3 o cuatro tandas, con descansos de 10 minutos entre cada una, y así el tiempo de reposo hará parte del trabajo.
  • Una vez amasado dale forma de bola y vuelve a colocar en el bol ,dejándolo reposar durante una hora y media o dos horas en un sitio cálido, hasta que doble su tamaño (yo lo suelo tapar y dejar dentro del horno apagado). Este es el antes y el después.
  • Pasado este tiempo saca la masa sobre la encimera y de nuevo amasa durante un par de minutos, así saldrá bien todo el aire.
  • Dale forma de bola y con el dedo índice haz un agujero en el centro hasta el fondo.
  • Gira el dedo para hacer mas grande el agujero central y luego con los dedos de las dos manos, agranda el hueco del roscón. 
  • Sobre la placa del horno coloca un papel encerado y si tienes, un aro grande de emplatar. Esto no será necesario si haces bien grande el hueco central.
  • Coloca el roscón encajando el agujero en el aro de emplatar (este paso no es obligatorio pero ayuda a que no se nos cierre el centro cuando crezca la masa).
  • Tapa todo con un trapo y lo sacas al balcón toda la noche. Si donde vives no hace frío por la noche (menos de 4º) mete el roscón en el frigorífico.
  • Por la mañana mete la bandeja en casa y déjala templar durante al menos 40 minutos, este tiempo dependerá de si se ha quedado muy frío. Debe volver a coger una textura tierna al tocar con el dedo. Si la casa está algo fría se puede calentar durante un minuto el horno a 50 grados, apagarlo y meter la bandeja durante ese tiempo.
  • Bate un huevo y con cuidado pincela la superficie del rosco, espolvorea con azúcar perla y coloca unas frutas escarchadas, también se le puede poner almendra laminada, pero la decoración queda a tu elección.

  • Enciende el horno a 220º durante 15 minutos,  luego bajalo a 190º  y hornea durante 25 minutos. Si ves que se dora demasiado se le puede poner un poco de papel aluminio por encima.
  • Saca del horno y deja enfriar unos minutos sobre una rejilla.
  • El que quiera que lo rellene con nata o con crema o lo unte en la leche, cada uno a su gusto. 

Nota: si os gusta con nata, que no sea el chantilly de bote en spray, le va fatal. Con un brik de nata para montar bien frío, se bate con las varillas de la batidora hasta que quede bien firme y se añade 2 buenas cucharadas soperas de azúcar molido y volvemos a batir un poco más para mezclar, y listo. Si tienes cremor tartaro añade una pizca en el azúcar. Esto hará que la nata se conserve firme más tiempo.
 ¡¡¡Ayyy!!! que regüeno, madre mía.
Os dejo una foto más, la pillada por mi fotógrafo personal, (jeje) mientra hacia yo una con el móvil para instagram.
Nota : la cantidad de leche que te va a hacer falta dependerá del tipo de harina de fuerza que utilices, si es la típica de supermercado con 60 ml será sufieciente, pero si tiene más fuerza tendrás que añadir más cantidad. La masa debe ser consistente pero para nada seca, debe quedar elástica y sedosa. Si te parece que deja parte de la harina seca y no se une bien del todo, no dudes en agregar leche hasta conseguir la textura que necesitas.
Como puedes ver en la primera foto el roscón se ha resquebrajado ligeramente al hornear, se debe a que lo lleve al horno un poco antes de tiempo, tendría que haber levado un poco más pero había algunos personajes deseando comérselo y no les hice esperar más.

Comentarios

  1. Querida Carmen.

    La foto, muy bonita y seguro que está riquísimo.

    Pero me asalta una duda.
    ¿Por qué has tenido que echar un borrón en tu exitosa, hasta el momento, carrera de cocinera-blogera?

    Cualquier persona de bien sabe que un roscón de reyes, como dios manda, no lleva ese indigno ingrediente, conocido por algunos como 'fruta escarchada'.

    Aún así, muchas gracias por el aporte. A ver si alguien me lo prepara.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por visitar este blog y gracias por considerar exitosa mi carrera de blogera cocinera.En respuesta a tu comentario te diré que no está en el propósito de este blog generar polémica con las recetas, que están para disfrutar aquellas que nos gustan, y obviar las que no sean de nuestro agrado, y siempre con la posibilidad de reinterpretarlas a gusto de cada uno.
      Si el roscón de Reyes te gusta sin frutas escarchadas, simplemente no se las pongas, o prepara cualquier otro postre para estás fechas.
      Un saludo

      Eliminar
    2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

      Eliminar
  2. Estimado Anónimo:
    Gracias por tu aportación, pero lamento decirte que estás completamente equivocado. Un roscón de reyes sin fruta escarchada no es un roscón de reyes, es un bizcocho redondo con un agujero. Vamos, un donut de reyes. No creo que conozcas a alguien que perpetre semejante sin sentido. Un abrazo para la cocinera, ella sí que sabe lo que hace. Y otro para tí, que es Navidad.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares